El comandante de la Fuerza Naval del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, el contralmirante, Alireza Tangsiri, ha anunciado este jueves, que los desfiles marítimos están en marcha en el Mar Caspio (norte), el Golfo Pérsico y el mar de Omán (sur) para mostrar solidaridad con el pueblo de Palestina y condenar los crímenes de lesa humanidad y atrocidades del régimen israelí.
Así mismo, el alto cargo militar ha afirmado que, estas paradas militares se realizan simultáneamente en varios puertos del mundo musulmán, incluidos Siria, El Líbano, Yemen e Irak y en otros lugares del este de Asia, con la participación de más de 2700 embarcaciones.
En alusión al apoyo y respaldo popular sin precedente al país árabe en casi 120 países del mundo, incluso en los Estados europeos, Tangsiri, ha declarado que, “aunque los palestinos están oprimidos, son fuertes, ya que están conectados con Dios”.
En otra parte de sus palabras, el comandante de la Marina del CGRI, ha afirmado que las paradas militares transmiten este mensaje al “régimen infanticida” de Tel Aviv de que el pueblo oprimido de Palestina no está solo y que cada año mucho más que antes, el mundo da cuenta de las políticas de ocupación del régimen de Tel Aviv.
Los desfiles solidarios se llevan a cabo un día antes de que el mundo musulmán, celebre el Día Mundial de Al-Quds que tiene lugar cada año, el último viernes del mes sagrado de Ramadán (el noveno mes del calendario islámico).
En Día Mundial de Al-Quds, todos los musulmanes y personas libres del mundo, realizan marchas para expresar su solidaridad con la causa palestina frente a décadas de ocupación israelí. En un nuevo acto de provocación contra los fieles palestinos, cientos de colonos israelíes irrumpieron el martes en la Mezquita Al-Aqsa en Al-Quds (Jerusalén) bajo la protección de las fuerzas del régimen sionista como parte de la festividad de Pésaj (Pascua Judía).
Las incursiones israelíes de la semana pasada en el lugar sagrado desencadenaron ataques con cohetes desde la Franja de Gaza, el sur del Líbano y Siria, lo que provocó también ataques aéreos y de artillería israelíes contra las posiciones de la Resistencia palestina.
Desde la ocupación de los territorios palestinos de Cisjordania en 1697, incluida la zona del este de Al-Quds, el régimen de Israel, ha ido restringiendo cada vez más, el derecho de los palestinos a rezar en la Mezquita Al-Aqsa y, por otro lado, proveen protección a los colonos que realizan rituales judíos en el sagrado recinto, pese a que, según lo pactado, no tienen derecho a hacerlo.
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